Si estás atravesando un desenlace, bienvenida al Puente Arco Iris!
Puede ser difícil reconocer cuándo una visión o relación se han vuelto destructivas. El estado emocional nos desafía a encontrar el bienestar. Por eso creamos desenlaces.
Ya conocimos nuestro dolor o dependencia, ahora queremos conocer nuestra alegría y libertad.
Todo desenlace nos deja ver otra perspectiva de la existencia
La renovación de ciclos es la dinámica de la vida. El flujo natural de los caminos de conciencia.
Soltamos lo que ya conocemos y que nos trae los mismos resultados de siempre, para entrar en un mundo nuevo: ese donde volver a estar vigentes.
Una renovación que solemos enfrentar con miedo.
La buena noticia es que siempre esconde un tesoro.
Aspectos propios abandonados, por apegos excesivos. Descubrimos que también podemos pintar, escribir, hacer obras de arte, incluso a partir del dolor de haber cambiado.
Y esa emoción es la comprensión que nos faltaba para terminar de soltar y vernos habitando una nueva posibilidad.
Una renovación de afinidades
Cada final nos trae a la compresión del nuestro presente. Nos trae aquí y ahora para sentir qué está pasando en nuestra vida y volver a decidir la acción correspondiente.
Con la mente ocupada en el pasado, no escuchábamos al presente diciendo “Fin y Reinicio. Allí no hay nada más. Cambia el ciclo. Hay más vida por descubrir. No solo existe el puntito negro que te crees, bajo la lupa del dolor”.
Atravesamos el duelo por lo que necesitamos dejar atrás, aceptando lo que nos pasa sin luchar. Viviéndolo. Sintiéndolo.
Y en ese estado de sensibilidad, aparecen las ayudas. Libros, personas, oportunidades, viajes… para que ingresemos en el nuevo tiempo. Un tiempo en el que reconocer lo que somos o podemos ser.
Quizá no nos acompañe la misma familia. Pero llegarán otros… personas ligadas a nuestro nuevo corazón. Afines a nuestra nueva frecuencia.
¿Quién dijo?
Entonces empezamos a sentir la alegría de reencontrarnos más genuinas y creativas. Nos damos nuevos permisos.
¿Quién dijo que solo con esfuerzo se gana y sirve?
¿Quién dijo que si hacemos lo que nos gusta, no podremos sustentarnos?
¿Quién dijo que esto es todo lo que hay o merezco?
Sabemos que si avanzamos con la misma mentalidad condicionada, volveremos otra vez al ciclo anterior. En este nuevo tiempo, elegimos conscientemente. Adaptándonos a lo que el alma pide y saliendo de lugares que ya no van mas.
Así conocemos mundos dentro de este mundo, que no sabíamos que existían. Cambiamos de campo. Cuestionamos límites. Desafiamos rutinas. Lo queremos explorar todo, sintiéndonos más libres para decidir sobre nuestro destino.
Allí donde fluye, está la vida
Los miedos apegan y nos atan pero ya no les tememos. Tampoco nos hacemos las fuertes ante algo que duele o sentimos imperdonable. Reconocemos nuestra vulnerabilidad, legado de ciclos muy penosos, de baja la autoestima, debilitantes.
Pero sostenemos la convicción de que la fortaleza no esta en que los demás cambien.
Tampoco está afuera, sino en nuestra propia voluntad de renovación.
Porque no podemos cooperar cuando hay luchas y conflictos.
Nos potenciamos entre aquellos que vibran en nuestra misma sintonía.
Y se siente como un encaje de piezas perdidas, que encontramos moviéndonos con las señales. Esas que nos llevan hacia la tierra ideal para nuestro propio florecer.
Un sinfín de caminos
Las grandes verdades, profundas y sagradas, tienen diferentes formas de proyectarse en el mundo. Llegan en forma de un sinfín de caminos.
Lo que nuestra alma no logra conectar en uno, lo logra en otro. Ahora sabemos que no podremos encontrarlo sin renovarnos. Sin fluir por los ciclos.
Por eso es tan importante seguir buscando hasta encontrar finalmente eso que vinimos a buscar y que nos mueve.
El gran orden que da sentido a nuestra vida.
Te entregamos el legado desde los dominios del Diamante Infinito.
Un gesto del arte del colibrí, que practican todas las abuelas.
ABUELA ARCO IRIS
✨ Dejalo grabado en tu corazón. Y sembralo en el alma del mundo.
Mariana Bergamo | La Tribu del Colibrí
Una carta para mujeres que rse atreven a soltar lo que ya no son, para ser lo que son.